Comprobar que el anuncio es real y hacer el pago de forma segura puede ahorrar un disgusto el día de llegada. Además, para garantizar que la reserva es fiable, hay que contar con contrato y documentos que avalen el proceso
Se acerca el momento de hacer las maletas y preparar todo lo necesario para pasar las vacaciones de Semana Santa fuera de casa. Teniendo en cuenta que más del 17% de los españoles reservó en el último año su alojamiento vacacional por internet, según datos del Eurostat, se prevé que muchos de los viajeros pasen estos días en viviendas anunciadas en plataformas de alquiler online.
Las estafas que se han producido en estos nuevos sistemas de reserva alertan de la necesidad de que los usuarios conozcan algunas de las claves para evitar problemas durante las vacaciones. Así, los expertos del portal inmobiliario Vitrio proponen una guía con los pasos que deberían seguir todos los viajeros a la hora de realizar el proceso de reserva online:
- Asegurarse de que la reserva es formal: Antes de reservar el alojamiento, es muy importante conocer las condiciones del alquiler, y para eso hay que contar con un contrato. Quienes busquen casa online a través de webs que no disponen de un sistema de reserva necesitarán un documento físico. Si el propietario lo pasa por alto, es imprescindible exigirlo para garantizar que la reserva es efectiva, ya que podría darse la situación de verse en la calle el día de llegada.
En el caso de las plataformas que sí cuentan con sistema de reserva, el procedimiento de confirmación se considera en sí mismo un contrato, y las condiciones han de estar detalladas en la web.
- Comprobar quién gestiona la reserva: Además de los propietarios particulares, algunas agencias inmobiliarias también anuncian viviendas vacacionales online. Esto supone que, en caso de tener que hacer una reclamación por posibles problemas derivados del alquiler, varía el procedimiento.
Al reservar un alojamiento a través de un profesional, el usuario está amparado por la ley de consumo, mientras que en los alquileres vacacionales a particulares le protege la normativa civil de alquiler o la normativa específica de alquiler turístico, si la comunidad autónoma en cuestión cuenta con ella.
- Informarse de las condiciones de la fianza: Aunque no es de aplicación obligatoria, hay alojamientos que exigen en la reserva una señal ante posibles daños durante la estancia. En este caso, es fundamental informarse de las condiciones de la fianza y asegurarse de que el importe exigido queda reflejado, ya sea en el contrato físico o durante el proceso de reserva online.
- Elegir un método de pago seguro: El momento de abonar el importe de la reserva es cuando se está más expuesto a sufrir una estafa. Hay que tener mucho cuidado con los pagos por adelantado si el propietario no ofrece ninguna garantía para formalizar el abono. Normalmente, los estafadores suelen llamar la atención de los usuarios mediante fotos muy llamativas y bajos precios para engañarles y quedarse con el dinero de la transferencia sin ofrecer alojamiento alguno.
Además, el phishing es otra forma de estafa que se puede producir cuando el usuario intenta pagar online. En este caso, se recibe un correo electrónico con un enlace que redirige a un sitio web malicioso. El engaño se produce al dar información personal, como contraseñas y correos electrónicos, lo que permite introducir un virus que recaba todo tipo de datos confidenciales, incluidos los bancarios.
Lo más seguro es hacer el pago a través de los sistemas que proponen las plataformas, ya sea vía transferencia o con tarjeta, o mediante Paypal.
- Guardar los documentos de la reserva: Todos los recibos y documentos donde que se hayan ido generando en el proceso de reserva pueden servir de cara a una posible reclamación. Son la garantía para justificar el pago, las condiciones del alquiler y la fianza, por lo que lo ideal es contar con una versión impresa, además de la digital, de cada uno de ellos.